1 de Septiembre del 2019
Vigésimo Segundo Domingo del Tiempo Ordinario
Muchos pensadores destacados en la Iglesia se vienen dedicando al estudio de la humildad.
Santos como Agustín, Tomás de Aquino y Teresa de Ávila nos ayudan a apreciar la esencia de la humildad.
Fundamentalmente, la humildad acepta la verdad sencilla que Dios crea todo, y provee todo aquella que nosotros sus creaturas necesitamos.
La humildad, entonces, es la fe aplicada a la vida diaria.
Si soy creado en misma imagen que Dios, y si la meta de mi vida es unirme con Dios en el paraíso, entonces Dios desea solo el paraíso para mí.
Hablando de manea práctica, eso significa todo el día, cada día, Dios proveerá solo exactamente lo que yo necesito para crecer en santidad.
Además, Dios hace esto por mí tanto como lo haría por otra creatura en la tierra.
Todos los dones y talentos que tenemos vienen de Dios y todo lo que vemos como una falla o una debilidad nunca podría estar más allá de la redención poderosa de Dios.
EN DIOS CONFIAMOS
La humildad requiere que confiemos en Dios para darnos todo lo que necesitamos para vivir esta vida de tal manera que vivamos por siempre en el paraíso.
Este nivel de confianza en la providencia de Dios, es un don, y requiere tiempo cultivarlo.
Poco a poco, si nosotros de verdad, profundamente sabemos que Dios quiere darnos el cielo, entonces las dificultades comunes pierden mucha de su fuerza por desconcertarnos.
Con humildad, podemos dejar que alguien toma la última galleta.
Con humildad, podemos alegrarnos por la promoción de un compañero de trabajo.
Con humildad, podemos arreglar un desorden que no hicimos.
Podemos aceptar lo incompleto, la exclusión y el sacrificio debido a la absoluta certeza de que solo Dios provee lo que necesitamos.
El mismo Jesús nos pide elegir esta humilde forma de vida.
Jesús en el Evangelio de hoy dice: «el que se engrandece a sí mismo, será humillado; y el que se humilla, será engrandecido».
Esa expresión no es poesía retórica.
Jesús realmente quiere decir que la humildad cambia nuestra vida.
El nos desafía a «invitar a los pobres, a los lisiados, a los cojos y a los ciegos; y así serás dichoso porque ellos no tienen con qué pagarte; pero ya se te pagará, cuando resuciten los justos».
Sociedad Guadalupana
Se reúnen el primer y el tercer martes de cada mes a las 7 de la noche, en el cuarto numero uno, en el centro parroquial.
Adoración Nocturna
Cada viernes de cada semana de las 9:00PM a las 8:00AM (Inscríbite y elige una hora de adoración. Informes al 831-210-2364 con Rafael.
Grupo de Oración
Cada viernes en la Capilla de Guadalupe. Exposición del Santísimo cada primer viernes del mes.
Unción de los Enfermos
Cada primer viernes del mes, 7 de la noche, en la capilla de Guadalupe.
Horario de Misas / Mass Schedule
Saturday Vigil: 5:00 P.M.
Sunday, English: 8:30 & 10:00 A.M.
Domingo, Español: 12:00 y 1:30 de la tarde
Wednesday-Friday, English 8:00 A.M., Chapel
Confessions Saturdays: 4:00 P.M., Chapel
Confiar en Dios es ponernos en sus manos
Confiar en Dios requiere, de cada uno de nosotros, que nos pongamos en sus manos.
Esta confianza en Dios, base de la conversión del corazón, requiere que auténticamente estemos dispuestos a soltarnos en Él.
Cada uno de nosotros, cuando busca convertir su corazón a Dios nuestro Señor y busca acercarse a Él, tiene que pasar por una etapa de espera.
Esto puede ser para nuestra alma particularmente difícil, porque aunque en teoría estamos de acuerdo en que la santidad es obra de la gracia, en que la santidad es obra del Espíritu Santo sobre nuestra alma, tendríamos que llegar a ver si efectivamente en la práctica, en lo más hondo de nuestro corazón lo tenemos arraigado, si estamos auténticamente listos interiormente para soltarnos en confianza plena para decir:
«Yo estoy listo Señor, confío en Ti»
Mientras yo no sea capaz de soltarme a Dios nuestro Señor, mi alma va a crecer, se va a desarrollar, pero siempre hasta un límite, en el cual de nuevo Dios se cruce en mi camino y me diga:
«¡Qué bueno que has llegado aquí!, ahora tienes que confiar plenamente en mí».
Entonces, mi alma puede sentir miedo y puede echarse para atrás; puede caminar por otra ruta y volver a llegar por otro camino, y de nuevo va a acabar encontrándose con Dios nuestro Señor que le dice:
«Ahora suéltate a Mí»; una y otra vez, una y otra vez.
Éste es el camino de Dios sobre todas y cada una de nuestras almas.
Y mientras nosotros no seamos capaces de dar ese brinco, mientras nosotros no sintamos que toda la conversión espiritual que hemos tenido no es en el fondo sino la preparación para ese soltarnos en Dios nuestro Señor, no estaremos realmente llegando a nada.
El esfuerzo exterior sólo tiene fruto y éxito cuando el alma se ha soltado totalmente en Dios nuestro Señor, se ha dejado totalmente en Él.
Sin embargo, todos somos conscientes de lo duro y difícil que es.
¿Qué tan lejos está nuestra alma en esta conversión del corazón?
¿Está detenida en ese límite que no nos hemos atrevido a pasar?
Aquí está la esencia del crecimiento del alma, de la vuelta a Dios nuestro Señor.
Solamente así Dios puede llegar al alma: cuando el alma quiere llegar al Señor, cuando el alma se suelta auténticamente en Él.
Nuestro Señor nos enseña el camino a seguir. La Eucaristía es el don más absoluto de que Dios existe.
De alguna forma, con su don, el Señor me enseña mi don a Él. La Eucaristía es el don más profundo de Dios en mi existencia.
¿De qué otra forma más profunda, más grande, más completa, puede dárseme Dios nuestro Señor?
Hagamos que la Eucaristía en nuestras almas dé fruto.
Ese fruto de soltarnos a Él, de no permitir que cavilaciones, pensamientos, sentimientos, ilusiones, fantasías, circunstancias, estén siendo obstáculos para ponernos totalmente en Dios nuestro Señor.
Porque si nosotros, siendo malos, podemos dar cosas buenas, ¿cómo el Padre que está en los Cielos, no les va a dar cosas buenas a los que se sueltan en Él, a los que esperan de Él?
Pidámosle a Jesucristo hacer de esta conversión del corazón, un soltar, un entregarnos plenamente en nuestro interior y en nuestras obras a Dios.
Sigamos el ejemplo que Cristo nos da en la Eucaristía y transformemos nuestro corazón en un lugar en el cual Dios nuestro Señor se encuentra auténticamente como en su casa, se encuentra verdaderamente amado y se encuentra con el don total de cada uno de nosotros.
Autor: P. Cipriano Sánchez LC | Fuente: Catholic.net
Catecismo
¡Las inscripciones para el Campamento Bíblico para edades de 7-10 años ya están abiertas!
Comienzo de RICA: Invitamos a aquellos que buscan ser católicos a notificar a Elisa para tener una conversación informal sobre su interés.
Pre-catecumenado
Esta es la primera fase de este proceso; es también conocido como un Periodo de Escrutinio.
Catecúmenos y candidatos reconocen que Cristo los llama a su Iglesia a traves de la gracia del Espíritu Santo. Este es un tiempo de búsqueda y reflexión.
Las clases de RICA comenzarán el 1 de septiembre de 2019 de 8:30 am a 9:45 am.
Inicio de la formación de niños y adolescentes- El 22 de septiembre de 2019, se lleva acabo los domingos:
Adolescentes en la middle school o clases de confirmación para estudiantes de high school 8:30 am-9:45am
Niños de primaria – 10:00 am- 11:15 am
Los costos son:
RICA No Bautizado– Donación
Confirmación de adultos RCIA– $ 50 por persona Formación de fe para adolescentes y niños: $ 50 para un niño, $70 para dos niños y $ 100 para 3 o más niños.
Para más información llame al Elisa 831-623-4178
Bautismos
Para el resto del año 2019 solo quedan fechas para baustismo en grupo.
No quedan mas fechas para bautismos privados.
Adoración Nocturna
Adoración nocturna todos los viernes de 9PM a 8AM.
Lugar: Capilla de Guadalupe
Todos son bienvenidos (pueden enviar un texto a Rafael, con las horas que deseen participar 831-210-2364.)
Night Adoration will begin June 14th, every Friday 9PM to 8AM in the Guadalupe chapel, everyone is welcomed, (please send a text to Rafael with times you’ll be participating 831-210-2364).
Buscamos Docentes para la Misión
Buscamos para la misión y museo docentes voluntarios.
Llamen a la oficina parroquial y por favor hablen con Benito.
Gracias.
La meta de AMA y los resultados
Pudimos recaudar $12,450.90 hacia nuestra meta de $15,800.00. Gracias a todos los que participaron.
Estamos a la altura de nuestra campaña pero estamos cortos $ 3,349.10, que tendremos que dar de nuestro presupuesto a la Diócesis para apoyar a todos los ministerios que proporcionan.
Si no ha participado, por favor rece y de la cantidad a la que estás llamado ofrecer.
Cualquier cantidad es muy apreciada.
Lo que da se sabe que se da con mucho amor.
Gracias.